“Solo se ve bien con el corazón”, dice Saint-Exupéry en “El Principito”. Los papás de Sophia saben que si uno solo se fija en lo exterior, se equivoca. Sophia tiene hoy 9 años. Nació con el síndrome de Rett, una enfermedad que afecta al lenguaje y las funciones motoras. Tan solo en España la padecen 6.000 personas (en su mayoría niñas), explica Dolors Massot en Aleteia.
Presentó desde el primer momento deformidades faciales, en los pies y en las manos. Conforme se iba desarrollando su cerebro y su cuerpo, sufría convulsiones y ahogos, lo que movieron a los médicos a intervenirla quirúrgicamente en 22 ocasiones.
En casa de la familia Weaver la acompañan un hermanito y una hermanita, que a cada rato demuestran lo mucho que quieren a Sophia: poco les importa cómo son sus dientes, su boca, sus ojos…