El pasado viernes (29 de enero) fue aprobada por el parlamento portugués la ley de eutanasia. Han votado 218 diputados (son 230) y el voto fue: 136 a favor, 78 en contra y 4 abstenciones. Ahora la ley pasa al Presidente de la República que puede promulgarla o remitirla al Tribunal Constitucional.
La Federación Portuguesa Pela Vida y muchas personalidades del campo médico están haciendo campaña para esta revisión del Tribunal Constitucional.
La eutanasia portuguesa es una tragedia en la actual situación de la pandemia de coronavirus en Portugal con cientos de personas que mueren cada día. Es una verdadera tragedia no solo para la devastación del CoVid sino para el futuro de Portugal. Ni siquiera existe el peligro de una futura “pendiente resbaladiza” en Portugal… la ley ya es la consagración escrita de la misma.
Los diputados no tomaron en cuenta las acciones y campañas sociales contra esta ley, presididas por un enfoque plural, los argumentos de profundidad desarrollados y el lamento social a esta ley.
La Federación One of Us se une a la Federación Portuguesa por la Vida y a todas las personas y organizaciones que han estado desarrollando las campañas para evitar la aprobación de esta Ley. Este apoyo lo es desde la convicción de que una sociedad construida sobre la base del abandono hasta la muerte de las personas, es una sociedad no solo injusta, sino dirigida a un fracaso profundo en sus relaciones interpersonales a nivel individual, familiar y social. Los gobernantes deben legislar para garantizar la vida de las personas y no cómo o cuándo deben morir. Los médicos deben curar a los enfermos y no matarlos.